Tarta de manzana

Llevaba un tiempo pendiente de preparar esta receta que muy generosamente de dio una compañera de trabajo, pero por uno u otro motivo al final quedaba siempre en la intención y ¡mira que me gustan las tartas de manzana!, por eso cuando el otro día me cruce con mi compi en la oficina, me dije para mis adentros que sin falta sería la primera receta que publicase.... y aunque tarde, ¡dicho y hecho! 

Se trata de una tarta sumamente sencilla y fácil de elaborar, nada empalagosa ya que contiene poca cantidad de azúcar, sobre todo cabe destacar su intenso sabor a manzana reineta, principal ingrediente, ideal para ésta receta por su acidez. Aunque seguramente ya conoceréis distintas de tartas de manzana sin base de ningún tipo, os invito a probar ésta, ya me contaréis... ¡Aquí os dejo la deliciosa receta de tarta de manzana de mi compañera Sioni, espero que os guste tanto como a mi!

Molde cerámico de Emile Henry  de  Claudia&Julia

En las fotos Stand de mármol con pie de madera de Kitchen Craft en Claudia&Julia

TARTA DE MANZANA

Ingredientes:

• 1 1/2 Kg. Manzanas reineta

• 100 g. Mantequilla derretida

• 100 g. Harina

• 100 g. Azúcar

• 1 Cucharadita de levadura

• 3 Huevos

• Mermelada de albaricoque para barnizar

• Un poquito de mantequilla para el molde

Elaboración:

Lavamos, pelamos y cortamos en gajos las manzanas, reservando un par de ellas hermosas para decorar. En un bol ponemos el resto de las manzanas, junto con los demás ingredientes, es decir, la mantequilla derretida, la harina, el azúcar, la cucharadita de levadura y los tres huevos. Batimos hasta conseguir una mezcla homogénea y sin grumos.

Untamos un molde con mantequilla y volcamos sobre él la mezcla anterior. Nivelamos  la superficie y colocamos encima los gajos de manzana reservados a nuestro gusto de manera decorativa.

Horneamos alrededor de una hora entre 170 y 180º en horno precalentado previamente. Un cuarto de hora antes de sacarla, pincelamos con la mermelada de albaricoque rebajada con unas gotas de agua y terminamos de hornear hasta que quede dorada.